De la familia del calabacín y el melón, el pepino se encuentra entre las hortalizas más consumidas del mundo gracias a su alto contenido en vitaminas. Poco a poco se ha ido integrando en la dieta, sobre todo en forma de zumo de pepino. Se encuentra entre las bebidas utilizadas para perder peso porque es una verdura muy baja en proteínas, grasas y azúcares. Por otro lado, es muy rica en agua, que representa más del 90% de su peso. Pero sus beneficios no se quedan ahí.
¿Cuáles son los principales beneficios del zumo de pepino?
Los pepinos tienen más de un truco bajo la manga. Su fina piel aporta una amplia gama de vitaminas y minerales: vitamina C, vitaminas del grupo B, vitamina E, provitamina A y potasio. Por lo tanto, no es necesario pelar el pepino al hacer el zumo.
El zumo de pepino refuerza el sistema inmunitario. Rico en vitaminas (A, B, C y D) y otros nutrientes que el cuerpo necesita, el pepino combate la fiebre y ayuda a mantener una buena temperatura corporal.
Los pepinos también son un excepcional aliado para adelgazar. Con su contenido de agua de más del 90%, tiene muy pocas calorías. Esto la convierte en la bebida perfecta para las personas con sobrepeso que están a dieta. Su alto contenido en fibra proporciona una sensación de saciedad que reduce el deseo de picar entre horas.
Su alto contenido en oligoelementos y minerales lo convierte también en un excelente diurético natural. Reduce la retención de líquidos y ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo. Para aprovechar sus cualidades, se recomienda tomar un vaso de zumo de pepino de 2 a 4 veces al día.
Para encontrar otros beneficios notables del jugo de pepino, haga clic aquí.
Ideas de zumo de pepino
Preparación del zumo de pepino puro
Para hacer zumo de pepino puro, necesitará tres pepinos de tamaño medio, dos tazas de agua y una pizca de sal y azúcar.
Pele los pepinos y quíteles las puntas, luego córtelos en trozos pequeños.
Ponerlos en la batidora y añadir el agua. Mezclar hasta que la mezcla sea perfectamente homogénea.
Colar la mezcla para eliminar las fibras restantes y añadir sal y azúcar al gusto.
Servir frío.
Receta para adelgazar: zumo de pepino con piña, apio, limón y jengibre
Esta mezcla facilita la pérdida de peso. Debe consumirse una vez al día durante una semana, seguida de un descanso de tres días. Para prepararlo, necesita medio pepino, 75 g de piña cortada en trozos pequeños, dos tallos de apio, 2 g de jengibre, zumo de limón y un vaso de agua.
Primero, pele el pepino y córtelo en trozos, luego lave los demás ingredientes y bátalos hasta que tenga una mezcla perfectamente homogénea.
Añada el zumo de limón y bébalo fresco en ayunas.
¿Cómo elegir y conservar los pepinos?
Un pepino de buena calidad es pequeño (unos 15 cm), de color verde y uniforme, elástico, tiene una piel lisa, un tallo duro y un aroma agradable. No recomendamos comprar pepinos con grietas, manchas claras u oscuras, protuberancias y arrugas.
Para mantener los pepinos frescos y crujientes, lo mejor es mantenerlos en la encimera a la temperatura de la cocina. Esto retrasa su deterioro y evita la congelación. También deben mantenerse alejados de los tomates y los plátanos, que producen gas etileno, responsable de la maduración de las frutas y verduras y, por tanto, de su putrefacción.
Si todavía quiere conservar los pepinos en el frigorífico, hay que lavarlos y pelarlos, meterlos en una bolsa de plástico y colocarlos en el contenedor de verduras si están enteros. Si se trata de una rodaja de pepino, pélela, ponga una toalla de papel encima y póngala en una caja hermética. La temperatura debe estar entre 0 y 4°C. Esto permite mantener la frescura durante más tiempo (de 5 a 7 días).
Contraindicaciones y perjuicios del jugo de pepino
Para el público en general, beber zumo de pepino sin moderación provoca flatulencia, hinchazón y diarrea.
Para las personas con problemas digestivos, no se recomienda tomar zumo de pepino con granos, ya que los granos dificultan la digestión.
Las personas con insuficiencia renal, cálculos renales o nefritis tampoco deben consumir pepino fresco. Los pepinos pueden agravar la enterocolitis, las úlceras pépticas, la colitis y la gastritis.
El pepino no se puede consumir si el paciente sufre una patología que va acompañada de una alcalinización excesiva del organismo.
En las mujeres en periodo de lactancia, tampoco se recomienda el consumo de pepino porque puede provocar heces anormales en el bebé o favorecer el desarrollo de cólicos intestinales.